Historia
Historia
Antes de 1977 el Estado Colombiano no tenía instrumentos para garantizar el cumplimiento efectivo de normas de seguridad vial, como la revisión técnico mecánica de los vehículos automotores, debiendo recurrir a la celebración de convenios con "talleres", muchos de ellos sin infraestructura tecnológica, ni estandarización de procesos que garantizarán un idóneo servicio de revisión y una contribución importante a la seguridad vial y a la protección de la vida.
Por ese motivo se decide la creación de una empresa de economía mixta, con independencia patrimonial y autonomía administrativa, orientada a diagnosticar con carácter de neutralidad el estado técnico mecánico de los vehículos que circulan en el municipio de Santiago de Cali.
Hasta 1985 cumple satisfactoriamente los objetivos de su creación, consolidándose a partir del concepto de revisión técnico mecánica obligatoria para todos los vehículos automotores. En ese año por delegación el Organismo de Tránsito del Municipio se crea la infraestructura para iniciar el servicio de expedición de Licencias de Conducción.
El programa se constituye en modelo para el país, permitiendo la expedición de licencias de conducción en una hora, eliminando las "licencias provisionales", al introducir procedimientos automáticos e integrar en un solo sitio la toma de fotos, el pago de derechos, los servicios médicos y en general todas las actividades necesarias para prestar el servicio.
El programa de Licencias de Conducción consolida la imagen del CDAV, demostrando que el Estado a través de empresas como ésta puede realizar procesos eficientes de buena aceptación ciudadana.
La ejecución del programa de licencias permite al CDAV incursionar en la prestación de servicios masivos de tránsito, convirtiéndose en agente recaudador de terceros, de impuestos, derechos del INTRA, del Municipio, Departamento y la Nación.
Antes de 1990, tomando como punto de referencia los centros de reconocimiento españoles se desarrollan las bases para las pruebas psicotécnicas y se introducen elementos como el polireactígrafo, para evaluar las aptitudes y actitudes de los conductores.
El CDAV documenta experiencias de otros países y se inician los programas de capacitación en seguridad vial y manejo defensivo.
La posición líder que gana el CDAV, le permite trabajar en otros programas de investigación, ser tomado como modelo para la creación de nuevos centros de diagnóstico en el Valle y en resto del país y apoyar la creación del Consejo Nacional de Centros de Diagnóstico Automotor del sector Oficial.
Hasta 1995 se mantiene la obligatoriedad de la revisión técnico mecánica anual para los vehículos particulares, incluidas las motocicletas, lográndose en este frente los mayores niveles de atención de servicios en la historia de la empresa.
Al finalizar 1995, el CDAV había desarrollado una infraestructura, que le permitía atender al año 250.000 vehículos, entre carros y motos, producir aproximadamente 70.000 licencias de conducción y practicar 5.000 pruebas psicotécnicas a conductores.
La expedición del Decreto 2150 de 1995 elimina la obligatoriedad de la revisión técnica a los vehículos particulares y establece como indefinida la vigencia de la licencia de conducción, impactando directamente la dinámica empresarial del CDAV.
La presencia de la empresa frente a la comunidad disminuye, al no poder dar apoyo a programas de seguridad vial en la ciudad. Se suspende el trabajo de las áreas de investigación como factor preponderante de las políticas correctivas.
El Centro Diagnóstico redefine sus objetivos y estrategias corporativas. En coordinación con universidades locales, se dan los primeros pasos para elaborar un proyecto de reglamentación para el control a fuentes móviles que posteriormente se reglamentaría con la expedición de la Ley Marco Ambiental o Decreto 948 de junio 5 de 1995, fue así como estructuró el Programa de Control de Emisiones Contaminantes Vehiculares, estableciéndose convenios con la Secretaría de Tránsito y Transporte Municipal y el Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente "DAGMA".
Se inicia la descentralización de los servicios, llegando a las sedes de las empresas con programas de verificación de emisiones contaminantes en automotores.
Se establecen algunos servicios de outsourcing, para la expedición de licencias de conducción en otros municipios.
Se trabajó permanentemente para generar cultura ecológica entre los propietarios de vehículos, buscando mantener el parque automotor circulante en Cali, dentro de los estándares de emisiones permitidos por la Ley.
El CDAV participa en mesas de trabajo a nivel nacional para la adopción de políticas y desarrollos legales y técnicos para las emisiones vehiculares.
Como respuesta al compromiso institucional de mantener bajos niveles de accidentalidad vial, se consigue la afiliación al Concejo Interamericano de Seguridad y se fortalece el servicio de diagnóstico e intervención en los factores humanos de la accidentalidad, haciendo de las pruebas psicotécnicas, con todas sus variables y aplicaciones uno de los productos importantes que se dejan al servicio de la comunidad.
Se celebran convenios interinstitucionales generando alianzas que garantizan la vigencia del CDAV:
Con el Municipio de Santiago de Cali STTM, para la estructuración y puesta en funcionamiento del Programa de Servicios de Tránsito, mediante el cual el CDAV, se comprometió por doce años, a realizar para la ciudadanía caleña todos los trámites relacionados con el registro automotor de vehículos particulares, públicos y el cobro y manejo de multas y comparendos, asumiendo el CDAV los costos de operación y las inversiones iniciales, transfiriéndole al Municipio STTM rentas netas, libres de costos operativos.
Con el Departamento del Valle del Cauca, para promocionar entre los contribuyentes el pago oportuno de los impuestos de rodamiento a través de la red bancaria, desarrollando toda la parte logística de divulgación, y estructuración de bases de datos, para permitir al Departamento la Administración del Impuesto.
Con el Fondo de Prevención Vial, para adelantar campañas de prevención y seguridad vial, en la ciudad de Santiago de Cali, permitiendo que la Secretaría de Tránsito Municipal pueda adelantar campañas permanentemente a través de la División de Cultura y utilizar recursos externos provenientes de la porción que a seguridad vial debe destinar el SOAT.
Con la ARP del Seguro Social, para incursionar en asesoría en salud ocupacional, abriendo nuevos frentes de trabajo y mejorando el reconocimiento ante el sector empresarial.
En el año 2002 aparece la Ley 769, Nuevo Código Nacional de Tránsito, la entrada en funcionamiento de la revisión técnico mecánica obligatoria de vehículos particulares, sustentada en muchos estudios técnicos y en la Resolución 3500 de 2005, se inicia en enero de 2007, el Centro se constituye en uno en los primeros habilitados para ofrecer el servicio bajo la nueva norma
A partir de 2003, crea una Escuela de Enseñanza Automovilística y fortalece convenios con todas la ARPs y con las empresas más importantes de la región para operar servicios de capacitación y evaluación de conductores.
Fecha de publicación 22/12/2016
Última modificación 28/04/2023